9 de diciembre de 2025 - 2:01 PM
SALUD MENTAL | Artículo por psicóloga clínica Carolina Escobar 
carolina@escobar.gt


La Navidad suele asociarse con alegría, unión y celebración. Sin embargo, para quienes han perdido a un ser querido, estas fechas pueden convertirse en un recordatorio doloroso de su ausencia. El duelo se intensifica porque la cultura nos invita a “estar felices”, mientras nuestro corazón atraviesa un proceso de adaptación. ¿Cómo afrontar esta época sin sentirnos obligados a ocultar el dolor? Aquí encontrarás estrategias respaldadas por la psicología, rituales significativos y consejos prácticos para transitar este desafío con amor y respeto hacia tu proceso.


Por qué la Navidad puede intensificar el duelo

Los estímulos navideños —luces, música, reuniones familiares— evocan recuerdos y expectativas que contrastan con la realidad de la pérdida. El duelo no tiene fecha de caducidad: incluso años después, estas emociones pueden resurgir con fuerza. Reconocer esto es el primer paso para aliviar la presión social de “estar bien”.


Estrategias para afrontar la Navidad desde la salud mental

1. Permítete sentir

No intentes reprimir emociones como tristeza, enojo o nostalgia. Practica “ventanas de duelo”: momentos breves en los que te permites sentir y expresar lo que llevas dentro. Llorar no es retroceder, es parte del proceso.


2. Autocompasión y autocuidado

Trátate con la misma ternura que ofrecerías a un amigo. Incluye prácticas como respiración consciente, meditación o escribir tus emociones. Además, cuida tu cuerpo: alimentación equilibrada, descanso y movimiento son aliados para sostener el peso emocional.


3. Ajusta expectativas y pon límites

Acepta que esta Navidad será distinta. No te obligues a participar en todas las actividades. Aprende a decir “no” sin culpa y elige solo lo que te aporte bienestar.


4. Habla sobre la persona que falta

Compartir recuerdos y emociones con personas de confianza ayuda a aliviar la carga. Si lo necesitas, busca apoyo profesional o grupos de duelo. Hablar es sanar.


5. Crea nuevas tradiciones y rituales

Los rituales personalizados son herramientas poderosas para honrar la memoria y dar sentido a la ausencia. No se trata de olvidar, sino de integrar el amor en nuevas formas.


Rituales significativos para honrar su memoria

  • Encender una vela conmemorativa cada noche navideña.
  • Preparar su comida favorita y compartirla en familia.
  • Dejar un lugar simbólico en la mesa durante la cena.
  • Crear una guirnalda de recuerdos con mensajes y anécdotas.
  • Escribir una carta expresando lo que sientes y lo que quisieras decirle.
  • Escuchar su música preferida o donar a una causa que le importaba.


Actividades solidarias para transformar el dolor en esperanza

Una manera poderosa de honrar la memoria de quien falta es ayudar a otros. Estas acciones no solo brindan bienestar a quienes lo necesitan, sino que también generan un sentido de propósito en medio del duelo:


  • Visitar asilos de ancianos y compartir tiempo, música o alimentos.
  • Apoyar casas hogar para niños huérfanos con juguetes, ropa o actividades recreativas.
  • Organizar colectas de alimentos o ropa para familias en situación vulnerable.
  • Participar en voluntariados en hospitales, comedores comunitarios o refugios.


Convertir el amor en servicio es una forma de mantener viva la esencia de la persona que amamos y darle un significado profundo a estas fechas.


Afrontar la Navidad cuando falta alguien que amamos no significa borrar la tristeza, sino aprender a convivir con ella. Permítete sentir, cuida tu bienestar, busca apoyo y crea rituales que honren su memoria. Y si lo deseas, transforma tu dolor en esperanza ayudando a quienes más lo necesitan. Así, la ausencia se convierte en presencia simbólica, y el amor sigue siendo el hilo que une cada recuerdo.


La ausencia duele, y es natural que así sea. Pero en medio de la tristeza, también hay espacio para el amor, la gratitud y la esperanza. Cada lágrima habla de lo importante que fue esa persona en tu vida, y cada gesto que hagas para honrarla es una manera de mantenerla presente.


Recuerda: El duelo no es olvidar, es aprender a vivir con el amor que permanece. 

Que esta Navidad, aunque distinta, sea una oportunidad para reconectar contigo, con tu esencia y con quienes aún te rodean. Porque incluso en la oscuridad, siempre hay una luz que nos guía: el amor.