14 de diciembre de 2025 - 11:30 AM
Por La Redacción
Como parte de la Campaña Nacional para la Conservación del Pinabete 2025, el Consejo Nacional de Áreas Protegidas (Conap) organizó una visita de campo a uno de los bosques mejor conservados de esta especie en Guatemala. La actividad reunió a periodistas de la ciudad capital y comunicadores comunitarios, quienes recorrieron el Parque Regional Municipal K’ojlab’l Tze’te Tnom, ubicado en Todos Santos Cuchumatán, Huehuetenango, un área protegida administrada por la municipalidad local y reconocida por su exitoso modelo comunitario de resguardo.
El parque cuenta con 7 mil 255.40 hectáreas de ecosistemas de alta montaña, donde se conserva uno de los rodales de pinabete más intactos del país. Este logro es resultado del trabajo conjunto y sostenido entre autoridades municipales y comunidades locales, que por generaciones han asumido un rol activo en la protección del bosque.
Durante el recorrido, Esteban Matías, técnico del Conap, resaltó el alto valor ecológico del rodal de pinabete ubicado a 3 mil 600 metros sobre el nivel del mar, considerado uno de los sitios con mayor riqueza biológica en esta región del país.
Servicio comunitario obligatorio, un modelo de protección
Uno de los principales pilares de la conservación en Todos Santos Cuchumatán es el servicio comunitario obligatorio. Todos los hombres del municipio, entre 18 y 71 años, deben cumplir un año de servicio gratuito como guardabosques o dentro de las estructuras comunales.
El incumplimiento de esta responsabilidad conlleva sanciones comunitarias, como la suspensión temporal del acceso a servicios tales como agua, uso de leña o tránsito por caminos comunales. Este modelo ha permitido no solo mantener el bosque en excelente estado, sino también fortalecer la identidad comunitaria y el sentido de pertenencia en torno al valor del pinabete.
Campaña Nacional 2025
La visita forma parte de las acciones informativas de la Campaña Nacional para la Conservación del Pinabete, liderada por el Conap, el Instituto Nacional de Bosques (Inab) y el Consejo Coordinador de la Estrategia Nacional para la Conservación del Pinabete. Entre sus acciones destacan las giras de prensa, el monitoreo de bosques nativos y la promoción de plantaciones legales registradas, las cuales reducen la presión sobre los bosques naturales y contribuyen a la economía familiar.
Estas plantaciones funcionan como bancos de semillas, refugio para la fauna silvestre y fuentes de recarga hídrica, además de generar ingresos durante la temporada navideña.
Una especie protegida y prioritaria
El pinabete está incluido en la Lista de Especies Amenazadas de Guatemala y en el Apéndice I de la CITES. Su manejo se rige por la Estrategia Nacional para la Conservación del Pinabete 2019–2028 y el Reglamento de Manejo de Plantaciones y Áreas Productoras de Semilla (Acuerdo Gubernativo 198-2014).
Actualmente, más del 50 % de los bosques nativos de pinabete, equivalentes a más de 27 mil hectáreas, se encuentran dentro del Sistema Guatemalteco de Áreas Protegidas. Además, con apoyo del Banco Alemán de Desarrollo, el Conap impulsa un Programa de Compensación a la Conservación que resguarda más de 7 mil hectáreas adicionales.
Las autoridades reiteraron que el tráfico ilegal de pinabete es un delito grave. De acuerdo con la Ley de Áreas Protegidas (Decreto 4-89), estas acciones se sancionan con penas de prisión de 5 a 10 años y multas de 10 mil a 20 mil quetzales. La Ley Forestal (Decreto 101-96) también contempla multas de 400 a 50 mil quetzales y penas de uno a cinco años de prisión.
