23 de septiembre de 2024 - 9:50 AM
Por La Redacción / BBC


Así lo califica un periodista inglés que lleva 24 años cubriendo la violencia en México y estuvo la semana pasada en la zona, en el nororiente del país, reporteando el combate abierto que ya cumple dos semanas y ha dejado un estimado de al menos 50 muertos y 70 secuestros.

La crisis de seguridad, que no es la primera, es una de las consecuencias del arresto por parte de Estados Unidos de Ismael “El Mayo” Zambada, uno de los jefes del Cartel de Sinaloa.


El arresto de Zambada el 25 de julio parece haber sido, incluso, parte de esa disputa por el control de uno de los carteles más grandes del mundo: al subirse a un avión con Joaquín Guzmán López, uno de los hijos del Chapo, El Mayo firmó su entrega a las autoridades estadounidenses.


He ido 14 veces a Sinaloa y llevo décadas cubriendo al narco y nunca había visto una guerra civil como esta tras el arresto de El Mayo.


La ciudad está paralizada. Antes eran dos o tres días en ciudades pequeñas con cierta tradición de violencia, pero ahora es en una capital de un millón de habitantes. Los niños no van a las escuelas, muchos comercios no funcionan, hay escasez de alimentos en los pueblos aledaños.


Aparte de la guerra civil entre las dos facciones del Cartel, que es fuerte, hay dos cosas que son distintas esta vez: la gente se autoimpuso un toque de queda y las redes sociales están proliferando el miedo con videos muy crudos, falsos y ciertos, que generan una sensación abrumadora.


Y eso que es mucho lo que no se sabe, porque los periodistas locales no están saliendo de noche ni a las zonas rurales. La cifra de 50 homicidios es limitada. Ves que hay balaceras fuertes en las noches que nadie cubre y no llegan a los reportes oficiales.


Se siente una adrenalina y miedo al máximo, algo que nunca sentí en otros lugares.


AMLO dice que el arresto de El Mayo fue ilegal e irresponsable, porque generó esta crisis de violencia.