28 de octubre de 2025 - 4:19 PM
Por Yulisa Gutiérrez
La mañana de este martes, entre las calles del casco urbano del municipio de Chiantla, Huehuetenango, ocurrió un hecho que evidencia la fuerza de la vida: una mujer dio a luz a su bebé en la palangana de un picop.
La madre es Fabiola García, originaria de la comunidad de Río Escondido, de donde salió con rumbo al Hospital Regional, ya que el nacimiento de la pequeña se aproximaba.
El trayecto comenzó como una carrera contra el tiempo. Fabiola, con dolores de parto cada vez más intensos, fue trasladada por familiares quienes no dudaron en subirla al vehículo con la esperanza de llegar al centro hospitalario antes de que naciera la bebé. Pero la vida tenía sus propios planes, y en el camino, entre los nervios y la emoción, la madre dio a luz.

El automotor, cuya palangana se convirtió en una camilla improvisada, fue testigo del nacimiento de una nueva vida que vio por primera vez el mundo gracias a la asistencia del personal del centro de salud local. Allí, con el cielo como testigo, se escuchó el primer llanto de la niña, un sonido que rompió el silencio que predominaba.
La pequeña llegó sana y salva, llevará por nombre Yarely, mientras su madre se recupera favorablemente. Para muchos en el municipio de Chiantla, este suceso no solo fue una anécdota extraordinaria, sino un recordatorio del poder del amor, la solidaridad y la vida misma, que florece incluso en los lugares más inesperados.
