9 de septiembre de 2025 - 3:17 PM
SALUD MENTAL | Artículo por psicóloga clínica Carolina Escobar
carolina@escobar.gt
Mes de la Prevención del Suicidio
Cada 10 de septiembre, el mundo se une para hablar de lo que durante años se ha callado: el suicidio. Este 2025, bajo el lema global “Cambiemos la narrativa”, se nos invita a transformar el miedo en diálogo, el estigma en empatía, y el silencio en acción.
Hablar del suicidio no lo provoca. Al contrario, abrir la conversación puede salvar vidas. Este mes representa una oportunidad para sensibilizar, educar y acompañar a quienes atraviesan momentos de sufrimiento emocional. Es también un llamado a las instituciones, comunidades y familias para asumir un rol activo en la prevención.
Panorama actual: ¿Qué nos dicen las cifras?
Según datos recientes de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Asociación Internacional para la Prevención del Suicidio (IASP):
• Más de 720 mil personas mueren por suicidio cada año en el mundo.
• En América Latina, el suicidio es la segunda causa de muerte en adolescentes, después de los accidentes.
• 🇬🇹 En Guatemala, el Ministerio de Salud reportó que el 40% de los diagnósticos de trastornos mentales corresponden a menores de 19 años.
• Los hombres representan hasta el 80% de los casos fatales, especialmente jóvenes entre 15 y 29 años.
• Poblaciones vulnerables incluyen personas LGTBIQ+, indígenas, migrantes, adolescentes, sobrevivientes de violencia y quienes viven en zonas rurales con poco acceso a servicios.
Estas cifras no son solo estadísticas. Son historias, familias, comunidades que enfrentan pérdidas dolorosas y silenciosas.
Causas y factores de riesgo
El suicidio no es una enfermedad, sino una expresión extrema de sufrimiento emocional.
Las causas más frecuentes incluyen:
• Trastornos mentales no tratados (depresión, ansiedad, bipolaridad).
• Consumo de sustancias.
• Violencia, abuso, bullying o discriminación.
• Duelo, rupturas, desempleo o crisis económicas.
• Aislamiento social o falta de redes de apoyo.
• Mandatos culturales que reprimen la expresión emocional (especialmente en varones jóvenes).
Muchos intentos ocurren de forma impulsiva, en momentos de desesperanza profunda. Por eso, la prevención debe ser anticipada, comunitaria y empática.
Recomendaciones desde la OMS y OPS
La OMS propone el enfoque LIVE LIFE, que incluye:
• Limitar el acceso a medios letales (armas, pesticidas, medicamentos).
• Fortalecer la atención primaria en salud mental.
• Capacitar a comunidades, docentes y líderes locales.
• Promover campañas de sensibilización sin estigmas ni sensacionalismo.
• Fomentar la educación emocional desde la infancia.
La OPS, por su parte, lanzó en septiembre 2025 la Iniciativa Regional de Prevención del Suicidio, que busca fortalecer políticas públicas, mejorar la recopilación de datos y articular esfuerzos multisectoriales.
Educación y juventud: Sembrar prevención desde temprano
• En Guatemala, el Mineduc inició capacitaciones para docentes y personal técnico en señales de riesgo suicida.
• Se están contratando psicólogos y trabajadores sociales en las direcciones departamentales para acompañar a estudiantes vulnerables.
• Organizaciones como Aldeas Infantiles SOS promueven la educación emocional en todos los niveles escolares, como herramienta clave de prevención.
• El Congreso de México exhortó a aplicar protocolos escolares de prevención en todos los niveles educativos.
Iniciativas juveniles y comunitarias
• La campaña #StartTheConversation invita a jóvenes a compartir historias, crear arte y difundir recursos en redes sociales.
• El colectivo Youth Creating Change lanzó un kit digital con cortometrajes, animaciones y gráficos diseñados por adolescentes.
• En Guatemala, comunidades virtuales como ¡Aférrate a la vida! y Jolu Guatemala ofrecen acompañamiento gratuito y espacios de escucha.
• En Formosa, Argentina, se desplegaron acciones en hospitales, ferias comunitarias y medios locales para hablar del tema con responsabilidad.
Ritual de Esperanza
El 10 de septiembre, a las 8 p.m., se invita a encender una vela cerca de una ventana o en redes sociales como símbolo de apoyo, memoria y compromiso. Este gesto colectivo recuerda que la vida merece ser acompañada, incluso en sus momentos más oscuros.
Invitación a ser parte del cambio
Este mes, no basta con mirar hacia otro lado. Es momento de mirar hacia adentro, hacia quienes nos rodean, hacia quienes callan.
Cambiemos la narrativa. Demos voz a quienes la han perdido. Ofrezcamos presencia a quienes se sienten solos. Y recordemos que la empatía es el primer paso hacia la prevención.
La prevención del suicidio no es solo tarea médica. Es responsabilidad colectiva. Es un acto de amor.